Historia de la Maratón de Nueva York (el nuevo siglo)

Ni el terrorismo pudo con el Deporte

Con los atletas africanos en la nómina de participantes, la siguiente gran novedad llegaría en el año 2000: fue la primera maratón con participantes oficiales en silla de ruedas. La cifra de inscritos ya superaba los 30.000.

La Maratón de Nueva York siempre ha sido un ejercicio con un alto espíritu comunitario, y eso fue especialmente fehaciente en 2001, menos de dos meses después de los ataques terroristas del 11 de Septiembre. La carrera se convirtió en un símbolo de esperanza y renovación para los participantes, espectadores y, sobre todo, para los neoyorquinos. 25.000 corredores tomaron la salida, junto a una enorme bandera en la que ponía “United we run” (corremos unidos) en conmemoración del 11S. Maratón de Nueva YorkEra emocionante ver a todos chocar las manos con los bomberos y los policías, en señal de homenaje. El patriotismo alcanzó límites insospechados cuando la estadounidense Deena Drossin (más tarde su apellido pasaría a ser Kastor) corrió en 2h26’58’’, el debut más rápido de una americana, para ganar además el título nacional. Las victorias fueron para Tesfaye Jifar (el primer etíope en conseguirlo) y Margaret Okayo, logrando ambos batir el récord de la prueba.

En 2003 la Maratón de Nueva York se unió a la aseguradora holandesa ING, una relación que ha durado una década, hasta 2013. Ese año, Margaret Okayo rompió su propio récord de la prueba, con un tiempo de 2h22’31’’, dejando esa marca hasta la fecha como la mejor establecida por una mujer en la Gran Manzana.

En 2004, la poseedora del récord del mundo de maratón Paula Radcliffe, ganó la prueba femenina. La británica sacó apenas tres segundos a la keniana Susan Chepkemei en el final femenino más apretado de la historia en Nueva York. Edith Hunkeler, de Suiza, estableció el récord de la prueba en la categoría de silla de ruedas femenina.

La edición de 2005 vivió otra llegada emocionante, con el recordman mundial Paul Tergat aventajando al vigente campeón Hendrick Ramaala por apenas tres décimas de segundo, el final más apretado en toda la historia de la Maratón de Nueva York. El sudafricano Ernst Van Dyk estableció el récord en silla de ruedas masculino con 1h31’11’’, pero al año siguiente el australiano Kurt Fearnley lo volvió a batir dejándolo en 1h29’22’’.

El keniano Martin Lel ganó una segunda corona de laurel en 2007, al día siguiente de que Ryan Hall corriera en 2h09’02’’ y se llevara los clasificatorios para el equipo olímpico americano que iba a ir a los Juegos de Pekín. Una fecha que nunca olvidaremos, porque en esos trials murió de paro cardíaco Ryan Shay cuando sólo llevaba corridos 8 kilómetros. En categoría femenina, Radcliffe lideró la prueba desde el principio junto a Grete Wami. A 400 metros de la meta dejó atrás a la etíope para alzarse con el triunfo. En silla de ruedas femenina, Hunkeler rompió su récord de 2004.

En 2008, Marilson Gomes dos Santos ganó su segundo título (el primero lo consiguió sorprendentemente en 2006), y la vigente campeona Radcliffe otra vez tomó la cabeza desde el pistoletazo de salida para llevarse su tercera victoria. Sólo Grete Waitz (9) tiene más. Kara Goucher, tercera, estableció el récord de una debutante americana con 2h25’53’’.

Meb Keflezighi gana la Maratón de Nueva YorkEn el 40 aniversario de la Maratón de Nueva York, en 2009, Meb Keflezighi se convirtió en el primer americano en llevarse el triunfo desde que Alberto Salazar consiguiera su tercera victoria en 1982. Ha sido el último estadounidense en conseguirlo hasta la fecha en categoría masculina.