Rafa Vega
Volar a Nueva York, afortunadamente, es fácil ya que la alta demanda que tiene hace que haya gran cantidad de vuelos diarios. Si viajas desde una capital, incluso tendrás la suerte de hacerlo de manera directa. Otras ciudades pueden hacer escala con aeropuertos internacionales, que tienen también una elevada frecuencia con Nueva York y precios competitivos.
Las grandes aerolíneas tienen vuelos programados con Nueva York todos los días. También con bastante frecuencia las compañías americanas Delta, American Airlines, Continental Airlines o las internacionales British Airways, Air France o Turkish Airlines. Éstas son las más comunes, aunque puedes buscar vuelos con multitud de compañías. En los últimos tiempos, Norwegian está haciendo una campaña de precios bastante asequibles, también.
El precio depende de dos factores:
- La época del año: normalmente, el verano es temporada alta. Con lo que los vuelos a la Gran Manzana se encarecen para ese período. También en Navidad. Pero la primera semana de Noviembre, que es cuando vamos a volar a Nueva York, no es momento pico.
- La flexibilidad: En este caso, no podremos ser demasiado flexibles, porque tenemos que viajar en una fecha concreta sí o sí. Con lo único con lo que podremos jugar es con la llegada y la salida un día antes o un día después.
Lo mejor es buscar el vuelo con la mayor antelación posible. Cuanto antes lo hagas, más fácil tendrás toparte con buenas ofertas. Te recomiendo que lo hagas en cuanto haya terminado el sorteo de la maratón. Lo ideal, según muchos portales de viajes, es que los adquieras 71 días antes (unos dos meses y medio). Si los compras entre semana, podrás ahorrarte algo más. Esto también aplica a la fecha del vuelo: más barato martes, miércoles o jueves que en los festivos.
Bueno, bonito y barato
Se pueden encontrar incluso billetes por menos de 500/600 dólares, que es el precio estándar. De hecho, yo los he encontrado a poco más de 300 dólares, y no es una leyenda urbana. Lo puedes hacer a través de agencia de viajes o tú mismo por internet (mediante las webs de las compañías o de buscadores de vuelos como Skyscanner, Kayak o eDreams). También utilizo mucho Google Flights, un buscador que te permite introducir numerosos filtros para encontrar el vuelo que más te convenga: por precio, por horas, por escalas… En este último caso ahorrarás costes de gestión pero pierdes el trato personal que te da la agencia.
Para terminar, quiero darte un consejo: si ves un vuelo por debajo de los 400 dólares, cómpralo en ese momento y no lo dejes escapar. Porque, normalmente, no suelen bajar mucho más. Todo lo contrario, subirá y te arrepentirás de no haberlo adquirido. También puedes poner alertas en el buscador. Son gratuitas y muy útiles a la hora de avisarte en caso de que haya una bajada de precios.